Una de las fiestas más esperadas de la capital española es la del patrón de Madrid y de la agricultura, San Isidro. Se trata de unas festividades en las que el colorido de las calles, los trajes típicos y las ganas de divertirse de los madrileños son los protagonistas.
¿Pero de dónde viene esta tradición? La historia de San Isidro se remonta al siglo XI. El lugar donde se emplaza ahora la Ermita de San Isidro es un lugar del que dicen que el santo golpeando con una vara el suelo hizo brotar agua. A esta agua se atribuyen propiedades curativas, de hecho el rey Felipe II se dice que se curó de un mal debido a la ingesta de esta milagrosa bebida.
El tema del agua está vinculada con esta fiesta desde los inicios en los que cada año los madrileños acuden a la Ermita con botellas de agua para hacerse con una muestra del agua milagrosa.
La Ermita se encuentra cerca de una Pradera en el Barrio de Carabanchel, popular por albergar en esa zona sitios como el Estadio Vicente Calderón o el Parque Madrid Río. En la Pradera los madrileños acuden ataviados con los trajes de chulapos y a ritmo de chotis, trajes y baile típicos madrileños.
El día de San Isidro es celebrado con comida en puestos típicos en los que se venden bocadillos de embutidos como chorizos o morcilla y duelos y quebrantos o callos, guisos típicos hechos a base de restos de vaca o cerdo. Y no podemos olvidarnos del lado dulce de la fiesta, en estos días se venden las rosquillas típicas con diferentes variedades: las listas, las tontas y las de santa Clara.
Los madrileños viven esta fiesta de forma jovial y divertida. Cantan, bailan y pasan un rato en compañía de amigos o de la familia. El Ayuntamiento de la ciudad recoge muchas actividades para conmemorar esta fiesta como las corridas de toros de la Feria de San Isidro, los conciertos de música tradicional y actual, actuaciones para niños y muchas sorpresas como el desfile de gigantes y cabezudos con los personajes típicos de la fiesta.
Un momento ideal para disfrutar de las tradiciones de Madrid, de su gente y saber por qué Madrid y España son un lugar tan acogedor y divertido. ¡No te lo puedes perder!