Descubre qué cosas hacer en Madrid, la ciudad que nunca deja de sorprender. Desde sus calles llenas de historia y tradición castiza hasta sus rincones más modernos.
En una visita a Madrid no puede faltar la experiencia de ir a una corrida de toros en Madrid la Plaza de Las Ventas, considerada una de las más importantes del mundo, pues fue inaugurada en 1931. Y se ha convertido en un icono de la tauromaquia y recibe eventos mundialmente conocidos, como las Feria de la Comunidad de Madrid y la Feria de San Isidro en mayo y junio, donde se presentan algunos de toreros más famosos del mundo como Morante de la Puebla, Borja Jiménez o El Juli y se crea un ambiente único. Asistir durante estos festejos es una ocasión única para vivir la experiencia taurina.
Sin duda, una de las fechas más especiales es la corrida del 2 de mayo que es conocida como la “Gran Corrida Goyesca” en la que los toreros usan los trajes típicos de la época de Goya, sin duda, todo un viaje al pasado que merece la pena presenciar. También destaca la corrida del 15 de mayo, en la que se celebra el día del Patrón de la ciudad. Si no estás en estas dos fechas no te preocupes, porque desde finales de abril hasta principios de junio se celebran corridas todos los fines de semana.
Ir a una corrida es una de las experiencias más emblemáticas de la cultura española, siendo una de las tradiciones más longeva de la historia del país y en la que asistiendo, podrás comprender y disfrutar de parte de la identidad española.
Otro tipo de actividades que puedes hacer en la capital es ir a museos, desde los más clásicos como el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza o el Museo Reina Sofía, que se encuentran en el Triángulo del Arte. Donde podrás encontrar algunas de las obras de Goya, Velázquez, Picasso o Dalí. Hasta otros menos típicos como CaixaForum, que ofrece exposiciones temporales de arte contemporáneo, el Espacio Fundación Telefónica, dedicado a la tecnología, el arte digital y la fotografía, o Matadero, que se ha convertido en un centro cultural vanguardista y donde también encontrarás el Museo del Diseño.
También tiene una amplia variedad gastronómica, desde los míticos churros de San Ginés hasta el típico cocido madrileño, pasando por todo tipo de culturas y sabores. Para poder degustar comidas que harán que te chupes los dedos, se encuentran lugares como el Mercado de San Miguel o el Mercado de San Antón, en los que podrás probar un poco de todo, sin olvidar probar el bocadillo de calamares. La Bola o Casa Lucio son dos restaurantes históricos de la ciudad, donde degustarás lo más castizo y te sentirás como en casa.
O si te gusta más improvisar y no ir con un plan establecido, callejea por los barrios más populares como La Latina, Malasaña o Chueca, para poder disfrutar de una tarde de tapas, irte de compras a tiendas vintage o gozar de la vida nocturna madrileña.
Ana Aguilera Azorín